Según un informe publicado el martes por la agencia británica ‘Reuters’, la nueva postura de Estados Unidos y sus aliados que apoyan a la oposición armada en el país árabe, fue transmitida mediante un mensaje entregado a altos miembros de la autodenominada Coalición Nacional Siria (CNS).
La misiva, entregada hace una semana en la reunión de los llamados ‘Amigos de Siria’ en Londres, capital del Reino Unido, llegó en respuesta por los avances de Al-Qaeda y otros grupos armados, y la toma de bases pertenecientes al Ejército Libre Sirio (ELS) en el paso fronterizo entre Siria y Turquía.
“Nuestros amigos occidentales dejaron claro en Londres que no se puede permitir la salida de Al-Asad en estos momentos (…)”, señala un alto miembro de la CNS vinculado con Arabia Saudí.
Los altos miembros de la CNS sostienen que este cambio de prioridades, particularmente por parte de Estados Unidos y el Reino Unido, sobre la destitución de Al-Asad a la lucha contra los grupos terroristas está causando discrepancias entre los países occidentales que apoyan este conflicto de casi 3 años.
El pasado 11 de diciembre, Washington y Londres suspendieron, de manera temporal, la ayuda militar “no letal” a los grupos armados que operan en el norte de Siria, es decir, al ELS.
Siria, desde marzo de 2011, además de tener que hacer frente a los terroristas, sufre la injerencia de ciertos países occidentales y regionales que, mediante su apoyo financiero, armamentístico y logístico, coadyuvan a derrocar al Gobierno de Damasco.-
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